Misiones fue el equipo más preciso en un partido donde ambos apostaron a las fuertes defensas. El resultado final fue de 55 a 35 y clasificó a los misioneros al partido por el 9° puesto.
El comienzo pareció prometedor en cuanto a la producción de puntos. Chaco abrió el marcador con un doble de Álvaro Ghidini y Misiones respondió con un triple del Gómez Quinteros. Sin embargo, las buenas defensas realizaron un efectivo trabajo y mantuvieron un goleo limitado. Una corrida 7-0 de Misiones le dio la ventaja en el marcador y obligó a Roberto Martínez a pedir tiempo muerto. Luego de eso, los chaqueños lograron alcanzar la paridad, pero un bombazo de Misiones sobre la chicharra lo puso al frente al cerrar el primer parcial (17-14).
Misiones saltó nuevamente al parquet desplegando una rabiosa defensa, la cual dejó a Chaco casi 5 minutos sin poder anotar. Sin embargo, no lograron sacar provecho de esto ya que en los minutos siguientes solo anotaron 3 unidades. Los chaqueños lograron acercarse con una anotación debajo del aro de Emiliano Lípreri y, posteriormente, desperdiciaron la chance de alcanzar la paridad desde la línea de tiros libres. Eso le permitió a Misiones irse al entretiempo arriba por 26-22.
El sacrificio defensivo, las segundas ayudas y los buenos relevos fueron las jugas dominantes del juego al volver del vestuario por parte de ambos equipos. En un cuarto de bajísima anotación, los misioneros fueron los más precisos. Gracias a eso, lograron comenzar a tomar un poco de distancia en el tanteador. Cerca del final del cuarto, la diferencia alcanzó el doble dígito. Con ese plan de juego, Misiones pudo ir al último descanso en ventaja 36-28.
Al comenzar el segmento final, Chaco estuvo estéril en la ofensiva. Un triple de Santiago Konaczuk estableció 20 puntos de distancia y comenzó a cerrar la historia. Misiones solo se dedico a mantener la distancia hasta llevarse el partido por 55-35.
Por Leonardo Bravo